...tiró de su discografía más excelsa, la que empezó con esa oda a la tristeza, a la melancolía y a la desolación provocadas por una ruptura sentimental, como es "Girlfriend", y que prolongó con los extraordinarios "Altered Beast" y "100% Fun"...
Por Skar PD
Hacía mucho tiempo que Matthew Sweet no pisaba estas tierras y la oportunidad de esta visita, aprovechando la gira del excelente "Tomorrow's daughter", es algo que cualquiera que tenga un mínimo de sensibilidad musical no debería dejar pasar.

El concierto empezó mas que bien porque Laredo, la banda telonera, justo es decirlo, se mostraron absolutamente maduros, en el breve concierto que dieron. No es normal que a la banda telonera se la despida con una sonora ovación que les obligue a saludar con las consabidas reverencias. Y eso fue lo que ocurrió y muy merecidamente. Otro aliciente es la banda que acompaña a Matthew. Tienen entidad por si solos, ya lo creo. Ver encima del escenario a los imprescindibles Velvet Crush y al guitarrista de Dream Syndicate justificaban casi el concierto. Y antes de que se me pase, la lección magistral de guitarra que impartió Jason Victor fue de una altura digna de estudio.
Y para la ocasión "el Mateo" lo tenía claro y tiró de su discografía más excelsa, la que empezó con esa oda a la tristeza, a la melancolía y a la desolación provocadas por una ruptura sentimental, como es "Girlfriend", y que prolongó con los extraordinarios "Altered Beast" y "100% Fun".
Arrancaron con "Time Capsule" con un sonido un tanto excesivo que se fue corrigiendo a medida que sonaban "Pretty Please", la encantadora "Winona", y que acabó de consolidarse con "We're the same", primer pico emotivo de la noche.
A estas alturas el sonriente y sudoroso Matthew ya había establecido contacto emocional con la audiencia y a partir de ahí todos sabíamos que solo teníamos que dejarnos llevar por la intensidad que destilaban los cuatro tipos que estaban en el escenario.

A estas alturas la capacidad respiratoria de la concurrencia se veía seriamente amenazada. Y es que el aire parecía sólido. El boca a boca necesario llegó con la que, en principio, iba a ser el último tema, "Devil With The Green Eyes..."¿que vas a hacer ahora si tu corazón se está rompiendo?
Jason Victor se quitó la guitarra, Matthew le miró entre sonriente y expectante, Paul Chastain puso cara de "a ver qué pasa" y Rick Menck dijo que una más.
Y sonó "Evangelin", la trascendencia del "Girlfriend" volvió a agrandarse, y todos coreamos "Evangeline, Evangeline I think I love you". Toda una declaración de intenciones.
Estuvo muy bien .. Jason Victor estuvo yo creo que contenido en comparacion con otras ocasiones (casi se parte en dos la ultima vez que vino con Dream Syndicate) pero el concierto del Mateo estuvo muy medido y con un poco mas de POWER que de pop ... que no esta nada mal :-)
ResponderEliminarEstuve en el concierto. Muchas veces he visto El Sol tan hasta arriba como antes de ayer y no tantas, he de reconocerlo, el público tan volcado con el artista. Ir a por una cerveza era arriesgarse a perder un hueco que te había costado sudores conseguir. Una locura. El sonido inicialmente, como bien dices, fue horrendo y se arregló afortunadamente de inmediato. Este Mateo tiene muchísimo tirón aquí y se demostró en su concierto una vez más. Lástima que nos dejara apenas hora y media del comienzo sin bises. Se le puede perdonar.
ResponderEliminarSaludos,
JdG
Hoy toca en Bilbao, espero que las sensaciones sean ésas que describe Skar PD. Parece que el repertorio parte de la trilogía noventera y el último disco.
ResponderEliminarAbrazos.