...el que marcó un antes y un después, el que los catapultó hacia los episodios posteriores de mayor popularidad internacional... con connotaciones asociadas a una época pero muy vigente actualmente tanto a nivel político como social...
Bufff, 30 años ya del álbum clave en la discografía de la mítica banda de Athens, el que marcó un antes y un después, el que los catapultó hacia los episodios posteriores de mayor popularidad internacional con un recopilatorio como “Eponymous”, el fichaje por una multinacional con álbumes como “Green”, “Out of time” y “Automatic for the people”, y el que, dentro de la etapa con el sello independiente I.R.S. Records, venía precedido tanto del recopilatorio con caras b's de singles y rarezas pertenecientes a su primera época, el extraordinario “Dead letter office”, como de la que considero la gran obra maestra en estudio de los georgianos, el “Life's rich pageant”.
Habría que tener en cuenta también que no solamente fue clave en ese aspecto sino que, específicamente en España, abrió la puerta al mercado ochentero americano de rock alternativo independiente de calidad, especialmente al llamado Paisley Underground, aka Nuevo Rock Americano. Hasta ese momento podría decirse que solamente catábamos material británico del post-punk o, en su caso, de renombrados artistas internacionales del otro lado del océano como el Boss, Prince,… A partir de la publicación de “Document” nos llegaron casi de golpe junto a él, salvo para frikis, suertudos y especializados que ya las conocían, obras maestras de años anteriores como los primeros trabajos de sensacionales bandas de la talla de Violent Femmes, Dream Syndicate, Long Ryders, Rain Parade,… Por ello, y por mucho más, debemos estar agradecidos al quinto álbum de R.E.M.
Para sumergirnos en este álbum resulta casi imprescindible introducirnos previamente en la realidad social y política de aquellos años en los Estados Unidos, con un recelo in crescendo sobre la política de Ronald Reagan, el ex-actor que, a partir de sus excelentes dotes de comunicador, lideró la revolución conservadora de los años ochenta con una especie de apología del capitalismo más un ultranacionalismo que se dedicaba a señalar los enemigos exteriores del país, viéndose salpicado con polémicas y escándalos como el de ventas de armas a Irán y el apoyo a la milicia antisandinista en Nicaragua. Canciones como “Exhuming McCarthy” o himnos a la libertad como “Welcome to the occupation” o "Disturbance at the heron house” muestran precisamente el posicionamiento de Michael Stipe y sus compinches a nivel socio-político.
Pero por supuesto los temas que marcan esta POM son los tres singles. Para dejarse llevar por el instinto, “Finest worksong”, una clara demostración del poderío guitarrero de Peter Buck. Ese detalle alcanza el culmen absoluto con “The one i love”, apasionado ultramegatemazo con uno de los mejores riffs de la historia. Y qué decir de la archipopular, tantas veces incluida en películas o series televisivas, “It's the end of the world as we know it (and i feel fine)”. Con ella la apocalipsis, la destrucción, la salvación, la deriva continental en una canción inspirada en la dylanesca “Subterranean homesick blues” y musicalmente basada inicialmente en un tema de R.E.M. titulado “Bad day”, una crítica implacable en forma de parodia al sensacionalismo y amarillismo de los medios de comunicación y que vio la luz definitiva a posteriori, en un recopilatorio del 2003.
En el resto del disco, por supuesto, no faltan los enigmas típicos en sus letras, empezando por ese título del disco con el texto “File under water” en el lomo de la edición de vinilo. Por su parte, a nivel musical se introdujeron instrumentos folclóricos como el saxofón en ese mundo loco de “Fireplace” o el dulcimer, también conocido como dulcémele o salterio de los Apalaches, en "King of birds", un tema de acertijos indígenas con ciertas tendencias folkies y psicodélicas.
A todas ellas se suman la versión de “Strange” del grupo de postpunk Wire, la vigorosa “Lightnin' Hopkins” o ese intensísimo colofón que es “Oddfellows Local 151”.
En la reedición digital del 93 se añadieron como bonus tracks las caras b's de los singles, es decir, dos “mixes” de “Finest worksong”, tres versiones en directo de “The one i love”, “Time after time, etc” y “Disturbance at the heron house” más una versión instrumental de “Last date”, el temazo sixtie de Floyd Cramer, más conocido por Skeeter Davis.
Hay que destacarlo. No han cambiado mucho las cosas desde entonces, a lo sumo las caras protagonistas. Y es que “Document” tiene un pasado con connotaciones asociadas a una época pero muy vigente actualmente tanto a nivel político como social, porque si miramos los medios de comunicación no difiere en exceso la coyuntura presente de aquellos asuntos turbios a mediados de los ochenta. Hoy, 1 de Septiembre se cumplen 30 años desde aquel lejano 1987 y sí, cada vez más se acerca el fin del mundo tal y como lo conocemos, pero nos sentimos bien.
Muy muy grandes, sobre todo para mi hasta Green, despues, Out of Time no esta mal pero supone esa apertura a cierta comercialidad que le dio acceso al publico de masas y que tambien los condujo a dejar de apretar el piston musical.
ResponderEliminarBajo mi punto de vista, los dos albumes claves de esa epoca de los REM son este, Document y Green, dos autenticas obras maestras. Pero todo el trabajo anterior es excelente, apuntando muy muy alto con el excelente primer largo, Murmur, de 1989, un debut absolutamente brillante. Antes publicaron aquel EP, Chronic Town, tambien maravilloso.
Despues de Out of Time han sido mas alti/bajos que otra cosa aunque hay albumes reseñables como el que comentas, Automatic for The People y sobre todo para mi gusto, Monster.
En fin, una gran banda, brutal, que se mantuvieron en excelente forma hasta el final, cosa que muchas otras bandas de la epoca (aun activas algunas), no pueden decir.
Grandes REM!!! Gracias por recordarmelos! Y si, es el final del mundo como lo conocemos pero me siento de puta madre :D tambien!
Abrazotes!
El mejor de REM,de muy muy lejos,y si ya los conociamos desde CHRONIC TOWN,pero THE ONE I LOVE fue el que los puso en orbita.....ESTE ALBUM LO ESCUCHE MAS DE MIL VECES EN 1988 Y 1989.... PUEDO DECIR QUE DISTURBANCE AT THE HERON HOUSE y KING OF BIRDS SON LAS 2 JOYAS OCULTAS EN LA DISCOGRAFIA DE LOS DE ATHENS....CON AGES OF YOU y BOXCARS,CLARO
ResponderEliminarPor algún motivo, no se porqué, REM pasaba año tras año desapercibido para mi. Llegaron el resto: Dream Syndicate, Long Ryders, Green on red, Stray cats... y REM nada, no los hacía caso. Cuando alcanzaron el éxito masivo con Out of Time, tampoco me llegaron. Ha sido en los últimos años cuando he empezado ha escuchar y adquirir discos del grupo (hace 5 años no tenía ninguno en casa), pero aún soy un neofito. Este es tal vez el que más me gusta de los escuchados hasta ahora.
ResponderEliminarAbrazos
caray vuelvo a coinidir contigo tb el life reach pageant es la gran obra de los Rem y luego este disco
ResponderEliminarCuando los REM eran buenos. Enorme disco. El NRA con ellos tuvo uno de sus mejor combos. Y aqui sonaban frescos, agresivos, emocionantes...
ResponderEliminarQué disco más enorme.
ResponderEliminarAbrazo.
Un disco fantástico. Mi predilecto de ellos es "Reckoning", que compré por indicación del dueño de la tienda donde me dejaba los duros (sin saber nada de ellos) y que me fascinaron desde entonces. El punto era que nadie los conocía. Molaba ir de "enterado" (tradúzcase por "raro"). Mi preferido es "Automatic...", uno de los tres discos que más veces he escuchado.
ResponderEliminarPero este disco es fabuloso y tiene canciones inolvidables. Una de ellas (si hay tiempo y me dejan) sonará hoy en mi espacio en la radio.
Gracias por recordármelos.
Un disco enorme y fundamental de mi época favorita de los REM. Gracias por comentar, amigos. Abrazos.
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