...una obra donde el imperio acústico y los arreglos que acompañan sus melodías hacen que merezca la pena saborearla, darle oportunidades y si es preciso tener paciencia...Desde que descubrí a BECK a mediados de los noventa con su “Mellow gold” no he dejado de seguirle la pista con cada publicación esperando, sin desesperar, que llegara (no desecho que algún día suceda) su gran obra maestra. Considero a este ingenioso artista como uno de los más grandes, atípicos e inclasificables talentos de los últimos veinte años pero siempre me ha faltado algo (todo sea dicho, a mi juicio en “Odelay” del 96 estuvo rozándolo), siempre ha habido algún corte que no me cuadraba en el resultado final. No sé, cuestión de gustos, o rarito que es uno.
En el nuevo “MORNING PHASE” no iba a ser menos. Eso sí, mejora y mucho aquel decepcionante “Modern guilt” del 2008. La primera vez que escuché este nuevo chispazo del erudito cantante, compositor y multiinstrumentista angelino me aburrí como una ostra. Con la segunda quedé prendado de “Morning”, el tema que abre el disco tras esa breve introducción que es “Cycle”. A partir de la tercera, cuarta y sucesivas tomas de contacto el disco crece, de forma paulatina pero constante.
Si “Heart is a drum” es una preciosidad en toda regla con connotaciones que la aproximan a Nick Drake pero que podría encajar perfectamente con alguno de los temas más melódicos y brillantes de los neoyorkinos Nada Surf, en “Say goodbye” deslumbra un banjo y una armonía que nos transporta hacia alguno de los episodios más admirables de su pasada trayectoria.
Lo de “Blue moon” hay que escucharlo con calma, pausadamente, para valorar su grandeza. Luego “Unforgiven” y “Wave” (coincido con aquella brillante reseña de my King Nikochan en su isla y en el Exile SH Magazine) son probablemente, a mi gusto, las dos canciones que menos se ajustan a la homogeneidad del resto de la obra y que me impiden considerar rotundamente redondo un disco como “MORNING PHASE”.
Con la balada “Don’t let it go” o con ese “Blackbird chain” mejora la cosa pero tampoco son dos cortes que me maten. Después el pasaje instrumental “Phase” anticipa un final esplendoroso. “Turn away” está a la altura de cualquiera de los mejores temas de Simon & Garfunkel, se dice pronto. Y “Country down” es una auténtica maravilla, con esa armónica y esa guitarra que recibirían la bendición de Neil Young.
Cierra otra genialidad, la taciturna “Walking light”, y con ella un buen disco, no creo que el mejor de su discografía pero mejor que algunas injustas críticas que he leído cebándose en una obra donde el imperio acústico y los arreglos que acompañan sus melodías hacen que merezca la pena saborearla, darle oportunidades y si es preciso tener paciencia.
A mi me parece sin duda un trabajo extraordinario de Beck Hansen, y eso de que su obra maestra está por llegar... yo creo que ya la hizo, pero afortunadamente nos sigue regalando trabajos deliciosos como éste.
ResponderEliminarBrazzzos.
Toda una delicia, saludos
ResponderEliminarAyer precisamente lo iba escuchando en el coche con más tranquilidad JOHNNY, y estoy al 100% contigo. Si aquel SEA CHANGE del 2001 ya nos diera una visión atípica de Beck en unos registros de madurez balsámicos, este nuevo disco creo a mi entender lo consagra como uno de los más lúcidos, eclécticos y versátiles de la era moderna del Rock.
ResponderEliminarMe encanta, y sobretodo lo hace porque te exige un grado de concentración y paz interior para escucharlo necesaria. Creo que nos faltan discos que detengan el tiempo y nos obliguen a saborear su longitud, sus arreglos minuciosos y nos den una perspectiva más amplia sobre lo que es un disco en toda su amplitud. Y más todavía si uno lo necesita para calibrar los malos momentos como los míos.
Antes de opinar he querido escucharlo enterito, mientras terminaba de pintar de flamante rojo amapola las paredes de mi hermosa cocina...es íntimo y melodioso, a mí me ha gustado. Aunque siempre he opinado como tú, lovely, que detrás de esa cara de angelito rubio late un genio aun por deslumbrar. Pese a que siempre le he seguido los pasos esperando algo sorprendentemente cojonudo todavía no ha llegado el momento en el que diga..."ahora, niño, ahora te has lucido como tú sabes". Tiene temas buenísimos, pero sus discos suelen ser irregulares y creo que lo mejor está aún por surgir de su mente creativa.
ResponderEliminar"Blue moon" me ha gustado especialmente, qué disco tan alejado de aquél "Midnite Vultures" que le debió hacer ganar tanta pasta...y qué tanto bailoteamos algunos. Admiro esa capacidad de ser cambiante, es una prueba irrefutable de genialidad.
Kissessssssssssssss & Sexxxxxxx Laws!!!!!
a mi me parece un disco cojonudo, este punto intimista, pausado, lo borda. el hombre va sobrado, experimenta con todo, estilos, instrumentos, a su bola, siempre, fuera de corriente, y todo lo hace bien. lo que viene siendo un genio, vamos.
ResponderEliminarEste disco es una delicatessen. Me alegra que haya sido el primero que he escuchado de Beck (después de muchos intentos sin frutos con Mellow Gold) porque me ha dado un impulso especial a escuchar más cosas de este hombre y a ser paciente para apreciar todo el talento que desprende. De haber sido de otra manera no habría sido tan "especial" para mí. De lo que llevamos de año, éste quizá sea mi disco favorito.
ResponderEliminarSaludos! Un placer leerte y (al fin!) comentar aquí!
Vaya pasada de tema este que has puesto. ¿Es todo el disco así? Si lo es, voy en su busca pero ya.
ResponderEliminarUn abrazo, master.
Aun no lo he escuchado Johnny, lo tengo ahí a la espera, pero con Beck en general me sucede exactamente lo mismo que a ti, concuerdo totalmente. Algún día nos regalará esa obra maestra... o no. En cualquier caso tiene un puñado de buenos discos en los que abundan las genialidades.
ResponderEliminarUn abrazo
Me encanta este tema, suena a los mejores Moody Blues, intenso, emocionante, profundo. Desde luego este nuevo trabajo de Beck tiene muchas papeletas de llegar a casa.
ResponderEliminarAbrazos,
JdG
Pedazo de tema el que has escogido, cada vez que lo escucho descubro nuevas joyas, y a eso me ayudáis bloggers como tú. Tras leer esta reseña y la de Exile aún me gusta más este disco.
ResponderEliminarCreo que va para disco del año y sus arreglos de cuerda cada día me gustan más. Y esa falta de homogeneidad creo que puede deberse a ser culo de mal asiento que le impide repetirse; zigzaguea, juega al despiste, una vez samplers, ahora arreglos de orquesta, creo que su genio va en tantas canciones que me emocionan de su discografía, más que en un disco en sí, quizás se presione en exceso por crear tantas expectativas y huya de lo fácil. A mí me gusta como sea. Abrazos.
Pues no se puede expresar mejor, apreciado Johnny.
ResponderEliminarCon Beck, me ocurre como a ti, que si, pero no, no, pero si.
Habrá que escuchar esta nueva entrega, aun a sabiendas, de que como siempre, algunos temas serán el día mas soleado, y otros la noche mas oscura.
Un abrazote
Está de lujo Savoy, pero le falta la puntilla definitiva a mi gusto, como siempre me pasa con el geniecillo, aunque esta vez creo que menos. Brazzzzzo.
ResponderEliminarEl tema que he puesto de “Heart is a drum”, Silvo, es una auténtica delicia. Salud.
No tengo dudas en eso que dices, maese-brother Bboyz, en muchos cortes rebosa lucidez y eclecticismo, un buen bálsamo en estos tiempos.
Es curioso , querida Sinco, que seamos tantos los que coincidimos en apreciar sus discos como irregulares a pesar de la admiración que despierta este artista y la cantidad de temazos que tiene. Tiene capacidad, creo, para hacer un discazo que pase a lops anales de la historia. Recibe kissssses.
No me cabe la menor duda, masterSones Raúl, de que arriesga y experimenta, y en muchas ocasiones acierta, como en un tanto por ciento elevado de este trabajo.
El placer es mío que comentes Erik, en todos sus discos, unos más que otros, tiene grandes canciones donde rascar. Para mí por ahora, de lo que llevamos de año, hay varios antes favoritos, aunque todavía no tengo asentada una valoración bastante definitiva. Saludos.
Te diría, querido masterfriend Evánder que todo el disco va más o menos en la onda de “Heart is a drum”, aunque para mí hay un 80% más o menos que destaca considerablemente. Abrazo.
Lo dicho arriba a Sinco, my friend Lou, es curioso que seamos tantos los que coincidimos en la esperanza de una POM. Abrazo.
Oye, pues sí, Gregorio, ahora que lo dices también. Es un temazo “Heart is a drum”. Te gustará. Abrazo.
Cierto, apreciado Millan65, los arreglos son de una exquisitez suprema. Creo que tienes bastante razón en esta apreciación zigzagueante sobre la definitiva falta de homogeneidad y es muy posible también eso de que genera muy grandes expectativas. Para disco del año mío lo dudo pero buen disco lo es, no me caben dudas. Abrazo.
Fíjate great Ficus, que te digo que aquí hay más de soleado y que incluso puedo entender quien lo vea todo lúcido. Creo que te puede gustar bastante si lo saboreas con tranquilidad. Recíproco abrazote.
Se agradece la deferencia en dejar comentarios. Abrazos a tutiplén.
Relación la mía de amor odio con este artista. Me parecen estupendos sus discos hasta Odelay, a partir de ahí no logro conectar, e incluso, me parece exasperante por momentos algunas de sus producciones. Lo poco que he escuchado merece darle un voto de confianza. Saludos
ResponderEliminarPrecisamente lo estoy escuchando y estoy yendo poco a poco con él. ¡Es que Odelay me tiene hipnotizado! Un abrazo, querido Johnny.
ResponderEliminarNo me vas a creer my friend pero como llevo dos meses o así diciendo por ahi lo tengo sin abrir, y sigue igual, no tengo perdòn...ni tiempo, hoy curro de noche y en ofi, me lo llevo al curro y os cuento de una vez.
ResponderEliminarAbrazos.
Es cierto, apreciado Antonio, que con Beck son bastante habituales sensaciones dispares entre los aficionados a este mundillo. Dale confianza a este nuevo trabajo y algo de paciencia si es preciso, creo que te puede gustar. Salud.
ResponderEliminarPara mí también 21st century schizoid man fue Odelay el que más satisfacciones me produjo. Poco a poco con "Morning phase". Abrazo.
Ya llegará el momento, my superfriend Addison, y apuesto que te gustará. Abrazos.
Gracias a los 3 también por tener la deferencia en dejar comentarios..
Este disco me pilló de sorpresa. Lo oí la primera vez, y como no era lo que supuestamente esperaba de Beck, me dejó un poco frío. Pero, como no me fiaba de mi primera impresión, lo volví a oír con mas atención, y entonces empecé a descubrir que el disco tenía su miga, solo que necesitaba una atención especial. Me parece un gran disco, distinto a los anteriores (sobre todo a Odelay) pero un gran disco al fin y al cabo.
ResponderEliminarSaludossssssssssssssss
Te ha pasado algo parecido a mí, querido Bab, este disco necesita una atención especial. Abrazosssss.
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