Gracia Imperio |
Conozco el proceso, o mejor sería decir mi proceso. Conectar con cada nuevo trabajo del DOCTOR DIVAGO conlleva una serie de pautas que se repiten disco tras disco. Y claro está, el décimo (se dice pronto) no iba a ser menos.
Inicialmente un anhelo o estado de avidez, ese que se crea con las novedades de determinados y muy concretos artistas o bandas que tienen reservado un pequeño pero privilegiado lugar en el alma a base de una apreciada trayectoria y de un buen puñado de canciones con un significado muy especial. Después el primer contacto, la primera audición en la que surgen dudas. El “todo” no entra a la primera pero, sin embargo, se percibe que tiene un "algo". Imagino que ahí, en esa fase del proceso, caso de que fuera frecuente de ese modo en los prójimos, podría provocar que más de uno tirara la toalla, y máxime teniendo en cuenta las urgencias que existen en la actualidad a la hora de saborear un disco. Con cierta insistencia y perseverancia llegan progresivamente la segunda, tercera y sucesivas audiciones, y con ellas los nuevos matices, los nuevos ángulos y escondrijos que comienzan a horadar el coco y a dejar una huella que, después de dejarlo reposar unos días, acaba con cualquier atisbo de aquellas iniciales dudas hasta dejar un sorprendente y agradable poso, ese que se quedara para poder ser utilizado con cierta asiduidad en el futuro cuando el cuerpo lo pida.
Julio Galcerá |
“Imperio”, el título nº 10 de la discografía del DOCTOR DIVAGO y sus diez canciones, poco, o más bien nada, tienen que ver con emperadores o con el poderío de alguna ley u organización política. Si contemplamos el diseño de su excelente portada, una vez más realizada por Chumi, hallamos la clave antes de bucear musicalmente en su interior: “Imperio” pero de “Gracia Imperio”, la vedette de ojos musulmanes que triunfó en Valencia durante la década de los sesenta, auténtico icono de su época que murió en extrañas circunstancias dentro del "edificio maldito" (conocido así por las sucesivas muertes violentas posteriores) sito actualmente en el nº 1 de la Calle Tres Forques, casi enfrente del legendario Caverna Rock bar y a la que se le dedica el brillante segundo corte del álbum. Aquella estrella del "Apolo" y del “Ruzafa" es la primera de tres personajes reales que tienen su particular cabida en el disco. El segundo está en "Sonaba Julio Galcerá" donde se homenajea una de las más grandes instituciones rockeras valencianas como simbólico acompañante de un curioso viaje que deja atrás a falsificadores, adivinos, sembradores de discordia, timadores, embusteros, iracundos, aduladores, traidores y similares especímenes del género humano. El tercero de esos tres personajes, y con el que se cierra el disco, es “Barney Ross”. Puede que algún lector del presente piense en Sylvester Stallone con “Los mercenarios” pero la cosa es, digamos, más atractiva y rebuscada al recordar uno de los más populares pero poco reconocidos púgiles de la historia, un judío estadounidense con una biografía de película que allá por 1932 fue todo un campeón. No es la primera vez que el boxeo es protagonista de alguna canción del Doctor Divago.
Barney Ross |
Más cosas. “Imperio” se abre con la impactante “Sólo la mitad de la mitad de mí”, uno de los mejores temas del disco a mi gusto, sonido “divago” total, con uno de esos estribillos marca de la casa que casi sin darte cuenta acabas tarareando en el sitio más insospechado, toda una ofrenda a la “fuerza del sinsentido” y a la “nobleza del desvarío”.
Doctor Divago |
Turno para “Debilidad”. Pues qué quieren que les diga, cada día siento una especial mayor inclinación hacia esta canción, de la que no puedo evitar relacionarla con algún tema de Josele Santiago y sus Enemigos. Además es el primer corte del disco donde la palabra “amor” comienza a tener un protagonismo que se acentuará de forma evidente en “Ni una pizca de tu amor” o en el trallazo de “92 horas”, y de una forma más camuflada en “La deriva continental" (enorme, muy enorme esa apasionada comparativa con Pangea, el continente gigante del Mesozoico) o “Una vida plena” que, junto a ese medio tiempo titulado “Un argumento tan malo” completan una sucesión de melodías donde el verdadero "imperio" es un pop cuidadosamente orfebre en el que junto a una voz de Manolo Bertrán cada vez más depurada abundan matices sixties y algo psicodélicos con reminiscencias a clásicos del pop patrio más elaborado, desde 091 a Los Huracanes por marcar una línea imaginaria en el tiempo.
En este espacio se recomienda “Imperio” con las oportunidades que sean precisas porque es posible que el día menos pensado, ¡zas!, se pongan a canturrear sus canciones y descubran el universo que esconde la discografía del incombustible Doctor Divago. Además, la mayor de mis princesas, gran fan de este grupo y una de las personas de este mundo que más confío en su criterio musical ha dado un veredicto escueto y conciso: “¡Me encanta!”.
Bueno, my mestre, lo escucharé, Doctor Divago podría decirse que ya es un grupo de larga y sólida trayectoria. No tenía ni idea de la existencia de tal edificio maldito, seguro que Iker Jimenez sacaría tajada de esto. Las muestras suenan muy bien, pop-rock de calidad. Saludos
ResponderEliminarPues a la primera audición de los tres temas, se intuye que aquí hay algo más que "algo". Veremos el resto. Ya hemos comentado que cantar en español tiene su dificultad para que parezca creíble. Doctor Divago saben hacerlo muy bien. Me han gustado mucho los tres temas a la tercera escucha. Esto promete. No defraudan, no.
ResponderEliminarSaludosssssssssssssss
Es una asignatura pendiente, aunque, por supuesto, cuando he escuchado algún tema de DD siempre sabía que tenía ese algo del que hablas. Muy buena la disección que haces, Johnny, perfecta para anticipar lo que se va a escuchar.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Joder Johnny! coincido plenamente contigo, (una vez mas), diez discos y siguen mantniendo el mismo pulso en su música, emoción e intensidad, un gran grupo, como dices en tu descomunal entrada a modo de despedida ¡Me encanta!...y eso que este aún no lo he escuchado, pero me da igual, me encanta y lo sé, ademas tu me lo has dicho colega,
ResponderEliminarUn abrazo.
Gran disco...aunque como siempre por desgracia y después de tantos años editando buenos trabajos, nos enteraremos cuatro gatos, yo ya perdí toda esperanza. Un abrazo Johnny!!!
ResponderEliminarMe pasa como a Gonzalo, es una asignatura pendiente, y eso que los vi en directo hace años y me dejaron una impresión rara, no les pillaba el punto.
ResponderEliminarBrazzzos.
había oído que salía este nuevo trabajo. esperaba conseguirlo pero tus adelantos han precipitado los acontecimientos ya lo he encargado
ResponderEliminarMe fío más de la princesa que de tí, ja.
ResponderEliminarEn serio, Doctor Divago tiene una trayectoria que ya pagarían muchos. Aprovecho y te agradezco tanto de esta novedad como alguna anterior que me ha encantado, Barrence, Deer Tick, etc y por supuesto el curro que te metiste con los Ramones. Qué continúe el rock en este santo lugar.
Doctor Divago lo conocí a través de tu blog (como mucha otras cosas) y me parecen estupendos, de una calidad que los define como uno de los mejores grupos de pop-rock en español. Los temas suenan estupendamente y habrá que escuchar el disco completo, porque solo empezar con esa "Sólo la mitad de mí" te deja con ganas de más y más. Saludos
ResponderEliminarEl otro dia leia no se dónde que DD sacaban nuevo disco, y automáticamente pensé en ti, Kozmic Joh. Inevitablemente, este grupo me recordará a ti y a este sacrosanto blog. Sabia que era cuestión de minutos que apareciera por aquí.. ;)
ResponderEliminarTengo muchas ganas de verlos en vivo, por cierto.
El sonido de las guitarras absolutamente me encanta.
Cheers!!
pues, a falta de escuchar los siete temas restantes, esta mitad de la mitad del disco es cojonuda, especialmente el primer corte, toda una declaración de intenciones, estoy cada día más guapo y es por ti... GREAT!
ResponderEliminarMe pasa un poco como a Gonzalo y a Savoy. Los tengo pendientes, aunque todo lo que he escuchado aquí de ellos me gusta, sobre todo lo que se refiere al tema de arreglos de guitarras, como he comentado en más de una ocasión.
ResponderEliminarUn abrazo, master!
@ Chals: el otro día pasé por delante del edificio al compás de Doctor Divago mientras le contaba la historia a las nanas que escuchaban con sumo interés. Es un gran disco.
ResponderEliminar@ Babelain, Addison, Bernardo, AntonioR, Raúl: exacto, y luego ese algo se diluye en un todo. A por él, disco tras disco no defraudan y ya son muchos.
@ Gonzalo, Savoy, Evánder: algún día deberíais resolver esta asignatura pendiente, es posible que dándole las merecidas oportunidades os sorprendiera muy positivamente.
@ Àngel, Jordi: una trayectoria que ya les gustaría a otras bandas. Cierto, somos cuatro gatos pero privilegiados, así están las cosas desde hace mucho tiempo.
@ Scott: my cosmic friend, a mí en directo me gustan mucho. Cumplen todos los requisitos para ser una de mis bandas predilectas nacionales, hace tiempo que lo vengo diciendo como sabes.
Se agradecen los comentarios. Abrazos múltiples