Con el incombustible ROBYN HITCHCOCK & Emma Swift (29-4-15, El Loco Club)

ROBYN HITCHCOCK & Emma Swift (29-4-15, El Loco Club)

...que continúa sin dar muestras de agotamiento y que es perseverante a través de la décadas, al margen de modas, tópicos o estereotipos, manteniéndose en la segunda línea del pop y del rock... 

Ahí estuvo. Con el flequillo ladeado, con plenitud de canas, con más años, con alguna visible arruga, con sus camisas de lunares, con desbordante experiencia y con sobrado carisma. Ah, pero también con una actitud y una voz cual si hubiese consumido alguna pócima mágica de eterna juventud.

Robyn Hitchcock (29-4-15, El Loco Club, Valencia)
Foto cortesía de Perrín Muchacho Bass
Ahora bien, antes de que entrase en acción hay que mencionar en los prolegómenos a Emma Swift porque a los suficientres nos dejó embobados con ese sabor a folk, a country, a americana, con homenaje a Willie Nelson incluido. Calidad y calidez, a la par, una gozada.

Después el incombustible ROBYN HITCHCOCK demostró en El Loco Club de Valencia durante la velada del 29 de abril que continúa sin dar muestras de agotamiento y que es perseverante a través de la décadas, al margen de modas, tópicos o estereotipos, manteniéndose en la segunda línea del pop y del rock, con constancia a pesar de esos inconvenientes que nunca lo han catapultado a la popularidad masiva. Pero todo sea dicho, es que el éxito a estas alturas tampoco le hace falta. Sus fieles seguidores mostraron entrega y lealtad cuando el atípico trovador británico desempolvó sus clásicos así como cuando hizo gala del poderío que tienen sus nuevas melodías.

Robyn Hitchcock (29-4-15, El Loco Club, Valencia)
Foto cortesía de Perrín Muchacho Bass
Eso sí, los mencionados fieles seguidores ascendieron a la paupérrima cantidad de 60 y tantos privilegiados, y eso que el precio de la entrada eran 10 euros. Lamentable, penoso, desolador. Después pasa lo que pasa y, aprovecho para decirlo, entre chismorreos y comidillas rocanroleras de amigachos, se queja la peña de que a la tristemente conocida como “ciudad del caloret” no vienen artistas de calidad o comentarios similares. Desde aquí mis sinceros agradecimientos a la dirección de la Sala El Loco y a la promotora Tranquilo Música por el esfuerzo y la dedicación que prestan, se podría decir que casi altruista, a la hora de traer músicos de nivel a pesar de no obtener una respuesta adecuada de público y, probablemente tampoco en consecuencia, suficientes beneficios económicos.

Y es que en esta ocasión no estábamos hablando de un artista menor, novel o que vive de las rentas del pasado sino de una trayectoria de largo recorrido, con una creatividad que se mantiene palpable. Solamente hay que catar el flamante y resplandeciente último álbum The man upstairs, a mi gusto y juicio uno de los mejores discos del pasado 2014 y del que, como plato fuerte, desfilaron algunos temas, por ejemplo San Francisco Patrol", Trouble in your blood”, “Somebody to break your heart o la versión del Cristal ship de los Doors.

Robyn Hitchcock (29-4-15, El Loco Club, Valencia)
Foto cortesía de Perrín Muchacho Bass
Dicho todo ello tampoco es que rematara un concierto para echar cohetes, opinión subjetiva sin ánimo de ser compartida. Me pareció excesivamente monótono, uniforme, probablemente por actuar a pelo, sin banda y primar lo acústico. Además tampoco me pareció muy gracioso el Sr.Hitchcock en ese excesivo afán de, entre canción y canción, aparentar espontaneidad y generar buen rollo con el escaso público asistente, que si las cuerdas de la guitarra, que si la armónica suena mal y se deshace de ella lanzándola al público,... 

Entre las gemas ochenteras que se unieron a la cita no faltaron "My wife and my dead wife", "Madonna of the wasps", "Heaven" "Queen Elvis", "Raymond Chandler evening",… así como perlas posteriores del nivel de "Glass hotel", "Linctus house", "Full moon in my soul",... Y sí, se echaron de menos algunas preciosidades, por ejemplo junto a los Venus 3.

De lo mejor de la noche, a destacar, esos duetos finales con Emma Swift y versiones como el clásico "River man" de Nick Drake y, muy especialmente, el "Love hurts" de Gram Parsons junto a Emmylou Harris. Solamente por escuchar este enorme clásico en boca del gran Robyn Hitchcock y su acompañante femenina valía la pena asistir al concierto de un artista que, sin excesos, mira desde arriba porque es un auténtico héroe, un superviviente.

     * Surca hoy el Espacio un temazo de la talla de "Madonna of the wasps".

Comentarios

  1. Veo que el repertorio en los bises fue algo distinto a Madrid, los va rotando. La verdad es que tengo el regusto del concierto del otro día todavía exquisito en mi paladar.

    Brazzzzos.

    ResponderEliminar
  2. Ese Love Hurts debio sonar a gloria; una lástima lo del público, y eso que se le ha dado merecida publicidad de los medios. En fin, me alegro que lo disfrutaras, pocas cosas hay mejor que la música en directo, a mí me carga las pilas para toda la semana. Saludos amigo

    ResponderEliminar
  3. Ayer leí algo no se donde: "Lo importante no es ganar o perder, lo que si importa es no perder las ganas". Podría venir a cuento con el amigo Robyn, y encima nosotros salimos "ganando" jeje.

    Saludossssssssss

    ResponderEliminar
  4. No importaa la edad, el buen hacer se transmite una y otra vez y hay mucho de ello, saludos!

    ResponderEliminar
  5. sueerte de concierto desolacion por el escaso publico pero es asi este pais. Vep poco recambio generacional mas dedicado a dejarse los oidos con los spotifies que del calor del directo

    ResponderEliminar
  6. Yo Johnny, como dice Savoy, guardo un recuerdo imborrable de su paso por Barcelona hace ya casi dos años. Entonces fue diferente, venía con la banda de Peter Buck (REM) y Scott McCaughey, y tanto en su vertiente eléctrica como en la acústica versionando a Dylan me pareció todo un maestro sobre las tablas. Puede que sea uno de los cinco mejores directos que he visto en estos últimos 6 años.
    Lo del público también es una pena, aunque aquí por entonces reunió un buen número de presentes y eso, me imagino, también influirá en la actitud del músico sobre el escenario; aquí no pasó, ya digo. Pero he visto a músicos con cuatro gatos, ser todo unos profesionales.

    ResponderEliminar
  7. Sí, Savoy, una putada que por ejemplo no tocara “Adventure rocketship”, una canción que me gusta mucho.

    Ya te digo Antonio, fue una sorpresa muy grata.

    Pues sí, Bab, aunque no fuera un conciertazo está claro que Robyn es un incombustible

    Cierto Silvo.

    Toda la razón, Bernardo, hace tiempo que no hubo relevo generacional.

    Ya me habría gustado, querido BBoyz1970, imagino con Peter Buck y Scott McCaughey y aquello debió ser una bomba.

    Gracias por comentar, amigos. Abrazos a tutiplén.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario